Ahora que media España se va de vacaciones. Recuerdo con nostalgia lo que han dado de sí los doce días de vacaciones que hemos disfrutado mi mujer y yo navegando por la costa de Cádiz y Huelva en nuestro pequeño velero "Panchito".
Transcribo a continuación el Diario de Navegación que todas las noches, antes de acostarme, rellenaba en el cuaderno de bitácora y que resume cada jornada de navegación:
11 de julio de 2.012. Miércoles.
¡Por fin llegaron las vacaciones!. Llegamos al barco a las 18.00 h. Se produce el desembarco de Normandía: bolsas con ropa, comida, bebida, etc. Estibamos y arranchamos bien el barco para estar lo más cómodos en las dos próximas semanas. Cenamos en el barco.
12 de julio de 2.012 Jueves. El Puerto- Chipiona (28 millas).
Nos levantamos a las 9.00 h. En primer lugar aseo y desayuno en el Club Náutico del Puerto de Santa María (nuestro puerto base). Después compra de hielo y pan en un supermercado cercano.
Partimos a las 11.00 h. Tras abandonar el cauce del río Guadalete ponemos rumbo 285º a la boya del "Quemado" que dista unas 7 millas de nuestra posición. Buen tiempo: viento fuerza 3 oeste, marejadilla/ marejada. Viento, mar y corriente convergen en nuestra proa así que la navegación en principio es a motor. Motor a 2.250 rpm y unos buenos 5 nudos de velocidad con un consumo de 2,5 litros a la hora.
Algunos barcos de la Armada, con base en Rota, maniobran por la zona. En varias ocasiones tenemos que variar el rumbo, que dirige con exactitud el incansable piloto automático, para evitar algún que otro rumbo de colisión. Alcanzamos la boya del "Quemado" a las 12.30 h. Cambio de rumbo: Marcación 330 º a la señalización cardinal oeste "Salmedina" que dista unas 10 millas aproximadamente. Ahora con el viento por el través de babor izamos las velas y comenzamos la navegación a vela sin el molesto ruido del motor. Un auténtico placer. Mantenemos una velocidad de crucero de 5 nudos. Es el momento de echar el curri, Rapala de 15 cm, a ver si hay suerte. En otras ocasiones hemos capturado algún atún por la zona. Al cabo de un rato comienza a silbar el carrete. Hemos pescado una caballa de buen tamaño, a la que le siguen cuatro más.
A las 14.30 h dejamos "Salmedina" a estribor, pero como es temprano, decidimos continuar navegando a vela y entrar en Chipiona más tarde. Preparamos unos bocadillos de chorizo y comemos disfrutando de una magnífica navegación. Pasamos entre varios mercantes que aguardan fondeados la subida del Guadalquivir hacia el puerto de Sevilla. Cambiamos rumbo al 360º buscando una navegación más cómoda.
Alcanzamos Chipiona sobre las 17.30 h. En las proximidades de la boya de aguas navegables "El Perro" hemos pescado un pequeño bonito y una chova. No está nada mal.
Tras arreglar el papeleo, cargamos gasóleo y atracamos en el pantalán asignado. Limpieza de pescado, ducha, botellín de cerveza y ya estamos preparados para salir a dar una vuelta. Caminamos por el paseo marítimo hasta el Faro que da paso, a continuación, a la playa de Regla. Parada obligatoria en el Picoco. En su terraza, con una buena cerveza bien fría, asistimos a una bonita puesta de sol. Cena en el bar "El Alemán" y regreso al barco para finalizar nuestro primer día de singladura con una Franziskaner de trigo.
13 de julio de 2.012. Viernes. Chipiona- Mazagón (31 millas).
La jornada de navegación comienza temprano. A las 5.30 h no puedo continuar durmiendo debido a un fuerte dolor de cabeza. Suelto amarras a las 6.00 h y abandonamos el puerto de Chipiona. Poco viento, Fuerza 2 noroeste/ Marejadilla. Rumbo 335º a Matalascañas que dista aproximadamente 15 millas de Chipiona. Motor 2.250 rpm y 5 nudos. Grandioso espectáculo la salida del sol.
A las 9.00 h alcanzamos Matalascañas y despierto a Eva para que prepare el desayuno. El resto de la navegación hasta Mazagón, otras 15 millas, la realizamos al 300º, cerca de la costa para observar la belleza de los acantilados y de la playa que, a día de hoy, aún permanece virgen.
A las 9.00 h alcanzamos Matalascañas y despierto a Eva para que prepare el desayuno. El resto de la navegación hasta Mazagón, otras 15 millas, la realizamos al 300º, cerca de la costa para observar la belleza de los acantilados y de la playa que, a día de hoy, aún permanece virgen.
Los peces se muestran dormilones y sólo capturamos una caballa que se une al botín del día anterior.
Atracamos en Mazagón a las 12.30 h. Repostamos los 15 litros de gasóleo que hemos gastado en una navegación exclusivamente a motor.
Mi cuñado Pablo nos recoge a las 14.00 h y preparamos en su casa todo el pescado que hemos capturado en los dos últimos días. De rechupete. Que bueno y que satisfacción.
Por la tarde le damos un paseo por la ría de Huelva a las sobrinas de mi mujer. Echamos el curri pero no hay suerte.
Pablo e Inma nos invitan a cenar en el restaurante "Torre del Loro". Degustación de chocos, coquinas, rosada. Finaliza un día que comenzó mal pero que terminó muy bien.
14 de julio de 2.012. Sábado. Mazagón- Punta Umbría.
Nos levantamos a las 9.00 h. Y tras la rutina de de todas las mañanas: aseo, desayuno, compras, etc. Abandonamos Mazagón. Nuestro próximo destino la cercana Punta Umbría. Allí nos esperan nuestros amigos Javier e Isabel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario